Una explicación tardía
Tuve miedo y admiración, alavés, a tu cuerpo
Esto pasa con lo desconocido
Y me impuse a ignorarte para no conocerte
Pero no es como uno quiere sino como uno siente
Y conocí, poco a poco, a la fuerza, la dulzura de tus labios
La ternura de tus senos
La lujuria escondida debajo de tu Monte de Venus
Y ame este regalo de Dios
Comí tu cuerpo hasta reventar
Y me fui
Pensando que no hay más
Entonces la droga chupada de tu piel
Me paso factura
¿El alma duele? No lo sabía
.
Quise regresar a tu lado
Pero ya no estabas
Te busque entre los cuerpos de otras mujeres
Hasta el cansancio
Y de repente pare
¿A quien quería engañar, aparte de mi mismo?
No fue tu cuerpo el que me enamoro
Fue tu alma
Si te perdí y me merezco el sufrimiento
Y no estoy escribiendo esta carta para ti
Sino para todos los tontos de este mundo que no saben reconocer
Que es el alma de una mujer
Y no el cuerpo
El que nos puede dar felicidad